Para tener una buena hidratación primero es necesario dejar de lado todos los consejos, opiniones o creencias que se llegan a escuchar a nuestro alrededor, datos que si no vienen de un experto, pueden afectar la salud.
Estos son algunos de los mitos que perjudican tu hidratación:
1. Solo puedes hidratarte tomando agua
Una buena hidratación solo se logra con un equilibrio correcto entre la alimentación y la bebida. De acuerdo con un experto en la nutrición, una dieta saludable y equilibrada aporta entre el 20 al 85% de la ingesta de líquidos.
El brócoli, la sandía, las manzanas, entre otras frutas que hidratan tu cuerpo, benefician el consumo de líquidos, además de ser una variedad colorida y dulce de mantener la hidratación.
Ojo: procura mantener un balance en el consumo de frutas y acompañar el agua con algunas frutas (sin acompañar con endulzantes).
2. No tener buena hidratación no afecta a la salud
El agua es el elemento más esencial para el correcto funcionamiento de los órganos del cuerpo, sin ella es imposible mantener buena salud. Conforme se llevan a cabo las actividades diarias, el cuerpo pierde poco a poco los líquidos que consumió en un determinado momento del día.
La mayor parte de las personas cree que basta con solo ingerir un vaso de agua al iniciar el día, sin embargo, para tener un buen rendimiento en todas las actividades, se necesita de una correcta y constante hidratación.
Ojo: el cuerpo necesita de agua para poder funcionar correctamente, de lo contrario todos los órganos resentirán la falta de esta.
3. Evita los alimentos salados a toda costa
El sodio es un elemento que el cuerpo necesita (de forma medida), para mantener en equilibrio los fluidos corporales y un correcto funcionamiento en los nervios y músculos del cuerpo.
A través de la orina y el sudor disminuye el sodio, por lo que el consumo adecuado de sal ayudará a equilibrar las pérdidas.
4. Ingiere los 2 litros de agua que se necesitan por día
La recomendación de los dos litros no aplica a todas las personas, puesto que todos los cuerpos son diferentes y también sus necesidades.
El agua que necesita tu cuerpo depende de varios factores como el peso corporal, el nivel de actividad, la temperatura, la alimentación y el ejercicio.
Ojo: es importante acudir con un experto para conocer las recomendaciones de hidratación desde los más pequeños hasta los más grandes del hogar.
5. Tomar agua ayuda a adelgazar
El agua no ayuda a perder peso, ni interviene en reacciones de quema de kilocalorías. Tampoco hace ganar peso. Lo que sí, es que beber agua antes de comer causa un efecto que aminora el apetito, lo cual no es recomendable para la salud.
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